Cinco alimentos que debes evitar meterte cada día en tu cuerpo

1. Refrescos

Trata de convertirlos en una bebida ocasional, muy ocasional. No te acostumbres a comer con ellos. Piensa que son bebidas carbonatadas con muchos edulcorantes, conservantes y colorantes. Algunas también contienen cafeína.

2. Cereales de desayuno

Durante años hemos creído que desayunar con cereales fortificados era sano. Demasiado cine hemos visto. Pero la muchos cereales exceden las dosis de nutrientes recomendadas. Un estudio del Enviromental  Working Group (EWG) ha advertido que los niños están consumiendo una cantidad excesiva de vitamina A, niacina y zinc provenientes de estos cereales de desayuno. El exceso de vitamina A se ha relacionado con daños en el hígado y pérdida de pelo. El exceso de zinc impide que se absorba el cobre y puede traer problemas para el sistema inmunológico.

3. Patatas fritas de bolsa

Algunas están buenísimas, nadie lo pone en duda pero suponen demasiadas calorías (20 patatas contienen 154 calorías y 10 gramos de grasa). Imagina la bolsa entera lo que supondrá. No es extraño que este alimento se relacione con el aumento de peso en casi todos los estudios científicos. Además su consumo excesivo eleva los niveles de colesterol y el riesgo de enfermedad  coronaria.

4. Yogures azucarados o con sabores

He aquí un alimento con buena prensa que si se toma a diario en sus versiones edulcoradas y con sabores puede resultar dañino debido a los altos niveles de fructosa y siropes que se emplea para endulzarlos. La ingesta de altos niveles de azúcares incrementa el riesgo de diabetes. Lo mejor es tomar el yogurt en su versión más natural posible, al menos que no tenga azúcar, ya decidirás en casa cuánto le pones.

5. Queso

Es una gran fuente de proteína y calcio, además de otros nutrientes. Sin embargo, no se recomienda comer a diario porque tiene muchas calorías y solemos comer gran cantidad de queso, por lo cual es un alimento que está más cerca de ayudarte a ganar peso que a perderlo. Además es un alimento rico en grasas animales y con un alto contenido de sodio que puede desestabilizar a los hipertensos y puede predisponer a las personas sanas a padecer en el futuro hipertensión.

Fuente: 10/04/2015 Paola Lei | Woman.es